Cuenta la leyenda, que allá por el siglo XV un joven italiano renacentista se
enamoró de una bellísima señorita, hija de uno de los maestros más populares de Italia.
El joven, atraído por los encantos de la señorita decidió unirse en matrimonio.
El novio, aficionado a la cocina, mandó preparar un plato con el que poder sorprender a sus invitados. El plato tenía que resultar fácil y rápido, un arroz con el que dio color con hebras de azafrán.
Los comensales, al ver el plato tan colorido, quedaron encantados.
A partir de ahí, se comenzó a utilizar este condimento para elaboraciones culinarias de arroz. Los principales ingredientes que utilizaron, aparte del arroz, fueron: mantequilla, caldo de ave, queso parmesano, azafrán y trocitos de salchicha.
El truco consistía en añadir el caldo poco a poco, sin dejar que lo absorbiera por completo el arroz y sin parar de remover para obtener como resultado un arroz cremoso.
A este proceso es lo que denominaron risotto, riso (arroz).
INGREDIENTES
180 gr de Arroz Arborio.
800 ml de Caldo de pollo.
1 cebolla pequeña.
1 diente de ajo.
150 gr de setas variadas.
100 gr de queso parmesano.
150 ml de vino blanco.
Aceite de oliva.
PREPARACIÓN
Se sofrie la cebolla y el ajo, una vez que este transparente se añade el arroz, las setas y se sofrie todo junto unos minutos.
Se le añade poco a poco el vino removiendo bien, a continuacion se añade 3/4 partes del caldo reservando el resto para añadir mas tarde.
Se deja cocer a fuego lento unos 20 o 25 minutos (el arborio tarda bastante en cocer) y se le va añadiendo el caldo poco a poco segun lo vaya absorbiendo hasta que este en su punto (debe estar muy cremoso)
Justo en ese momento se le añade el parmesano rallado, se remueve y se retira del fuego.
Se deja reposar 5 minutos y se sirve inmediatamente.
Me encanta , DELICIOSO !!!
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